El verdadero enemigo de los Estados Unidos
Por Michael Flynn*
Los mayores enemigos que enfrentan los estadounidenses (sin excepción) NO son enemigos “allá afuera”, ni enemigos fuera de nuestras fronteras contiguas… ¡NO!
El mayor enemigo que enfrentamos está aquí mismo, dentro de nuestro propio gobierno.
No podemos ser indulgentes con quien quiere destruir nuestro modo de vida. Si no hay indicios de rendición de cuentas (y no parece haberlos), el pueblo estadounidense que votó por el desmantelamiento del llamado Estado profundo comenzará a sentirse traicionado e impotente.
Tenemos a nuestro defensor en la Casa Blanca (el presidente Trump). Ahora necesitamos que quienes lo rodean comiencen a moverse a su ritmo y a operar según su cronograma. Cada día que pasa representa una pérdida de impulso.
Sin rendición de cuentas, no puede haber reconciliación.
No puede haber una verdadera unificación de nuestra nación. Mucha gente siente que el gobierno (durante muchos años) nos ha fallado.
Fue Abraham Lincoln quien dijo:
“¿Cuándo debemos esperar que se acerque el peligro?
¿Cómo debemos protegernos contra él?
¿Acaso debemos esperar que un gigante militar transatlántico cruce el océano y nos aplaste de un solo golpe?
¡Jamás!”.
Todos los ejércitos de Europa, Asia y África juntos, con todos los tesoros de la tierra (excepto los nuestros) en sus arcas militares, con un Bonaparte al mando, no podrían, ni por la fuerza, tomar agua del Ohio ni dejar huella en las Montañas Azules, ni en mil años.
¿Cuándo, entonces, cabe esperar que se acerque el peligro?
Respondo que, si alguna vez nos alcanza, surgirá entre nosotros. No puede venir del exterior. Si la destrucción es nuestro destino, nosotros mismos seremos sus autores y consumadores.
Como nación de hombres libres, debemos sobrevivir a través de los tiempos o morir por suicidio.
Espero ser demasiado precavido; pero si… los sentimientos de nuestros mejores ciudadanos se distancian de nuestro gobierno, nos encontraremos en aprietos.
¿Cómo, entonces, nos protegeremos de ello?
La respuesta es sencilla.
Que cada estadounidense, cada amante de la libertad, cada persona que anhela el bienestar de su posteridad, jure por la sangre de la Revolución Americana no violar jamás, ni en lo más mínimo, las leyes del país; y que jamás tolere que otros las violen. Así como los patriotas de 1776 juraron defender la Declaración de Independencia, que cada estadounidense comprometa su vida, sus bienes y su sagrado honor a defender la Constitución y las leyes; que cada hombre recuerde que violar la ley es pisotear la sangre de sus padres y atentar contra su propia libertad y la de sus hijos.
Que cada madre estadounidense inculque el respeto por las leyes al bebé que balbucea en su regazo… que se enseñe en las escuelas, seminarios y universidades; que se escriba en los libros de texto, los libros de ortografía y los almanaques; que se predique desde el púlpito, se proclame en las asambleas legislativas y se haga cumplir en los tribunales. En resumen, que se convierta en la religión política de la nación; y que ancianos y jóvenes, ricos y pobres, serios y alegres, de todos los sexos, lenguas, razas y condiciones, ofrezcan sacrificios incesantes en sus altares.
Lincoln tenía solo 28 años cuando pronunció estas palabras (alrededor de 1838).
¿Dónde están los Lincoln de nuestro tiempo que hablarían hoy con valentía sobre las dificultades de nuestro futuro?
El coraje solo se contagia cuando un líder toma la decisión audaz e intrépida de ser valiente.
Tome la decisión hoy por el bien de nuestra nación.
Como veterano, me uno con gusto a todos aquellos creyentes que reconocen nuestra necesidad de proteger nuestro estilo de vida estadounidense.
*Michael Flynn es un teniente general retirado del Ejército de Estados Unidos. Sirvió durante más de 30 años en inteligencia militar, fue director de la Agencia de Inteligencia de Defensa (2012-2014). En 2017, fue el asesor de seguridad nacional de Donald Trump. Hoy es una de las figuras influyentes en el movimiento MAGA. En su segunda presidencia, Donald Trump lo nombró como miembro de la Junta de Visitantes de la Academia Militar de Estados Unidos en West Point en marzo de 2025.

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